Dairon Silva, mix media on fabric

Social networking. Expedited route to creation

Facebook and Instagram are the spaces that Dayron has to show his work. Compulsion is inferred by how he publishes through these social media platforms an inordinate amount of paintings, drawings and other pieces very diverse in style that he accompanied by comments such as: “I am the king of colorism”, “I continue creating art”, “I continue with my colorism ”, repeated continuously and without variation. This preamble is enough for him to present himself as an Artist and guide his audience on how color constitutes the plastic quality that distinguishes his work.

This is a random example that places us in the phenomenon of the internet and the wide promotional opportunities that originate from social networks. It is known that on these platforms, the artist, or whoever feels like one, has an open path to freely show his work without the need for intermediaries, or documents that prove whether or not he is worthy of this name. It is a phenomenon that openly confronts the hegemony of the professionalization of art. It challenges the authority of critics, curators, historians, gallery owners, specialists in general, and creates ways of direct relationship with a community made up of all kinds of people, with different ways of relating and receiving art and unequal access to the cultural world.

 

      

Dairon Silva, mix media on paper

The growing appearance of creators that emerge through social networks; and of curators, collectors, art critics ... who are increasingly alert to the new faces that appear on these platforms, including those who bet on an anticipated commercial success in correspondence with the number of likes or followers that the artist or the work has, it has naturally led to new reviews and evaluations of the concepts of art and artist. A return to "anything goes" or "anyone can be an artist" brings about the need to remove or dismantle structures in the consciousness of the receiver (whether he is trained or not) and to understand the aesthetic experience from new angles.

 

Dairon Silva, mix media on vinyl disc cover

The usual question is imposed: how to establish the quality parameters for a production that navigates almost exclusively through alternative channels? In my opinion, beyond falling into old litanies of trying to distinguish what is or is not art, the fact of validating spaces where creation runs freely and openly to a mass public is more consistent with the human need and its purer impulses of expression. In this sense, we exposed the case of Dayron, who despite suffering of bullying and had been expelled by public polles of several Facebook groups, he persists in making and showing his art.

 

Dairon Silva, mix media on cardboard (left) and on vynil disc (right)

In order to always contribute to the enrichment of our visual culture, one is positioned in the place of those who do not discard creative proposals just because of the alternative space in which they are developed. In this sense, we would do well to broaden our thinking about artistry and understand once and for all that creation does not adhere to professionalism or to officially and institutionally established circuits. Then we can appeal to our visual experience or intuition itself if necessary, in case we want to make those much-sought value judgments.

Yenisel Osuna Morales

Art Historian with special focus and experience in Art Brut and Outsider Art in Cuba

 

Dairon Silva, mix media on paper

Redes sociales. Via expedita para la creación

Facebook e Instagram son los espacios de los que dispone Dayron para mostrar su obra. Se infiere compulsión por cómo publica a través de estas plataformas una cantidad desmedida de pinturas, dibujos a crayola y otras piezas muy variadas en estilo que acompaña de comentarios como: “soy el rey del colorismo”, “sigo creando arte”, “sigo con mi colorismo”, repetidos continuamente y sin variación. Le basta este preámbulo para presentarse como Artista y orientar a su público sobre cómo el color constituye la cualidad plástica que distinguen su trabajo.

Dairon Silva, mix media on vynil disc cover

Es un ejemplo aleatorio que nos ubica en el fenómeno de internet y las amplias oportunidades divulgatorias que se originan desde las redes sociales. Sabido es que en estas plataformas, el artista, o quien se sienta como tal, tiene un camino abierto para mostrar con libertad su trabajo sin necesidad de intermediarios, ni documentos que acrediten si es merecedor o no de este apelativo. Es un fenómeno que enfrenta abiertamente la hegemonía de la profesionalización del arte. Desafía la autoridad de críticos, comisarios, historiadores, galeristas, especialistas en general, y origina modos de relación directa con una comunidad integrada por todo tipo de personas, con diferentes formas de relacionarse y recepcionar el arte y desigual acceso al mundo cultural.

Dairon Silva, mix media on wooden table

La creciente aparición de creadores que surgen por las redes sociales, y de comisarios, coleccionistas, críticos de arte….que cada vez están más atentos a los nuevos rostros que se asoman por estos canales, habiendo incluso los que apuestan por un éxito comercial anticipado en correspondencia con la cantidad de likes o seguidores que tenga el artista o la obra, ha conducido naturalmente a nuevas revisiones y evaluaciones de los conceptos arte y artista. Un retorno del “todo vale” o de “cualquiera puede ser artista” acarrea la necesidad de remover o desmontar estructuras en la conciencia del receptor (sea este entrenado o no) y de entender la experiencia estética desde nuevas aristas.

Se impone la pregunta de siempre: ¿cómo establecer los parámetros de calidad a una producción que navega casi exclusivamente por canales alternativos? En mi opinión, más allá de caer en viejas letanías de intentar distinguir qué es o no arte, el hecho de validar espacios por donde la creación discurra de manera libre y abierta a un público masivo, resulta más coherente con la necesidad humana y sus impulsos más puros de expresión. En este sentido exponíamos el caso de Dayron, a quien no le llueven los seguidores ni los comentarios de halago, y que por el contrario le hacen bullying y encuestas para expulsarlo de los grupos de Facebook, y pese a esto persiste en hacer y mostrar su arte.

 

Dairon Silva, mix media on vynil disc cover

En aras de aportar siempre al enriquecimiento de nuestra cultura visual, se coloca uno en el lugar de quienes no descartan propuestas creativas por el solo hecho del espacio alternativo en el que se desarrollen. En este sentido nos haría bien ampliar el pensamiento sobre lo artístico y entender de una vez por todas que la creación no se ciñe a lo profesional ni a los circuitos establecidos oficial e institucionalmente. Luego podremos apelar a nuestra experiencia visual o la intuición misma de ser necesario, en caso de querer emitir esos tan reclamados juicios de valor.

Yenisel Osuna Morales

Historiador del arte con especial enfoque y experiencia en Art Brut y Outsider Art en Cuba